Tejados a dos aguas: elegancia y eficiencia

Podemos identificar un tejado a dos aguas por su forma. En esencia, se define como un tipo de cubierta inclinada que se compone por dos superficies planas que al unirse en el centro forman vértices que se aprecia como un triángulo en un punto alto, usualmente en el centro de la estructura. 

Estas superficies que se unen también tienen una inclinación hacia abajo, lo cual proporciona una caída del tejado hacia los dos lados de la edificación en un ángulo con el plano horizontal. A estas caídas se les conoce como dos aguas, porque el agua de lluvia corre por los dos vértices y así mismo es como sale del tejado.

Los tejados a dos aguas tienen una estética agradable y funcional tanto en el interior como en el exterior, porque la construcción tiende a ser más alta, lo cual da lugar a los áticos que comúnmente se construyen en casas y edificios. En todos los casos, proporciona un espacio adicional en la parte superior de la propiedad que puede funcionar como habitación, depósito o el espacio que desees.

A pesar de que es un tejado perfectamente útil para toda clase de edificaciones, ya sean edificios, casas, chalets, naves industriales o centros comerciales, sus usos son más residenciales que de otros tipos. Esto se debe a la altura que debe tener el tejado a dos aguas para ser perfectamente funcional, y a la estética clásica que proporciona a las viviendas unifamiliares.

Como bien te mencionamos, los tejados a dos aguas tienen una forma muy específica que les permite cumplir cabalmente con su función. En este punto, la forma de triángulo es lo que los caracteriza, pero cuentan con una serie de partes que complementan cada función y que te permiten tener un tejado perfectamente útil, resistente y estético.

Hablemos un poco sobre las partes que conforman la anatomía de cualquier tejado a dos aguas que goce de una construcción profesional:

• Cumbre o cumbrera: donde se unen los vértices de la superficie y se encuentra su punto más alto.
• Pendiente: son los lados del tejado, la superficie inclinada que proporciona la estructura para revestir y proteger el interior de la intemperie.
• Caballete: Es la parte que se encarga de recubrir y mantener unidas las dos superficies en la cumbre.
• Cabios: están en la parte baja e inclinada de los lados del tejado para soportar los caballetes y estabilizar la estructura.
• Alerones: son los lados que sobresalen de los edificios, donde la superficie se extiende para proteger la fachada del sol, la nieve y la lluvia.
• Tinas: están hechas de metal y se colocan sobre los lados del tejado que están inclinados. Su finalidad es ser una base para instalar las tejas.
• Tejas: todos los tejados a dos aguas tienen un recubierto de tejas que es la que ofrece un acabado aislado, con mayor resistencia y un flujo de agua constante que impide las obstrucciones y filtraciones de agua en el techo.

Todos estos elementos son complejos y deben instalarse con el orden, la técnica y estructura correcta para que proporcionen los resultados que esperas. Por esta razón, lo mejor es que contrates a una empresa experta en construcción de tejados en Alcobendas para que lleve a cabo el montaje del tejado en tu propiedad.